viernes, 24 de octubre de 2008

PoChe


"Compañeros:

Con profundo dolor he recibido la noticia de una irreparable pérdida para la causa de los pueblos que luchan por su liberación. Quienes hemos abrazado este ideal, nos sentimos hermanados con todos aquellos que en cualquier lugar del mundo y bajo cualquier bandera, luchan contra la injusticia, la miseria y la explotación. Nos sentimos hermanados con todos los que con valentía y decisión enfrentan la voracidad insaciable del imperialismo, que con la complicidad de las oligarquías apátridas apuntaladas por militares títeres del Pentágono mantienen a los pueblos oprimidos.
Hoy ha caído en esa lucha, como un héroe, la figura joven más extraordinaria que ha dado la revolución en Latinoamérica: ha muerto el Comandante Ernesto Che Guevara.
Su muerte me desgarra el alma porque era uno de los nuestros, quizás el mejor: un ejemplo de conducta, desprendimiento, espíritu de sacrificio, renunciamiento. La profunda convicción en la justicia de la causa que abrazó, le dio la fuerza, el valor, el coraje que hoy lo eleva a la categoría de héroe y mártir.
He leído algunos cables que pretenden presentarlo como enemigo del Peronismo. Nada más absurdo. Suponiendo fuera cierto que en 1951 haya estado ligado a un intento golpista, ¿qué edad tenia entonces?. Yo mismo, siendo un joven oficial, participé del golpe que derrocó al gobierno popular de Hipólito Irigoyen. Yo también en ese momento fui utilizado por la oligarquía. Lo importante es darse cuenta de esos errores y enmendarlos. ¡Vaya si el Che los enmendó!.
En 1954, cuando en Guatemala lucha en defensa del gobierno de Jacobo Arbenz ante la prepotente intervención armada de los yanquis, yo personalmente dí instrucciones a la Cancillería para que le solucionaran la difícil situación que se le planteaba a ese valiente joven argentino; y fue así como salio hacia México.
Su vida, su epopeya, es el ejemplo más puro en que se deben mirar nuestros jóvenes, los jóvenes de toda América Latina.
No faltarán quienes pretendan empalidecer su figura. El imperialismo temeroso del enrome prestigio que ya había ganado en las masas populares; otros, los que no viven las realidades de nuestros pueblos sojuzgados. Ya me han llegado noticias de que el Partido Comunista Argentino, solapadamente, está en campaña de desprestigio. No nos debe sorprender ya que siempre se ha caracterizado por marchar a contramano del proceso histórico nacional. Siempre ha estado en contra de los movimientos nacionales y populares. De eso podemos dar fe los peronistas.
La hora de los pueblos ha llegado y las revoluciones nacionales en Latinoamérica son un hecho irreversible. El actual equilibrio será roto porque es infantil pensar que se pueden superar sin revolución las resistencias de las oligarquía y de lo monopolios inversionistas del imperialismo.
Las revoluciones socialistas se tienen que realizar; que cada uno haga la suya, no importa el sello que ella tenga. Por eso y para eso, deben conectarse entre sí todos los movimientos nacionales, en la misma forma en que son solidarios entre si los usufructuarios del privilegio. La mayoría de los gobiernos de América latina no van a resolver los problemas nacionales sencillamente porque no responden a los intereses nacionales. Ante esto, no creo que las expresiones revolucionarias verbales basten. Es necesario entrar a la acción revolucionaria, con base organizativa, con un programa estratégico y tácticas que hagan viable la concreción de la revolución. Y esta tarea, la deben llevar adelante quienes se sientan capaces. La lucha será dura, pero el triunfo definitivo será de los pueblos. Ellos tendrán la fuerza material circunstancialmente superior a la nuestra; pero nosotros contamos con la extraordinaria fuerza moral que nos da la convicción en la justicia de la causa que abrazamos y la razón histórica que nos asiste.
El Peronismo, consecuente con su tradición y con su lucha, como Movimiento Nacional, Popular y Revolucionario, rinde su homenaje emocionado al idealista, al revolucionario, al Comandante Ernesto Che Guevara, guerrillero argentino muerto en acción empuñando las armas en pos del triunfo de las revoluciones nacionales en Latinoamérica".


Carta escrita por Juan Domingo Perón, referente a la recientemente conocida caída en combate del Comandante Che Guevara en Bolivia, un 24 de octubre de 1967.
Hace 41 años, y algunas cosas siguen tan vigentes...

jueves, 16 de octubre de 2008

El día de la lealtad


El 4 de junio de 1943, un grupo de militares nacionalistas derroca al gobierno de Ramón Castillo, en lo que fue el final de la llamada "Década Infame" (sí, con mayúsculas).
Los sindicalistas proponen a los militares fortalecer la CGT y sancionar algunas leyes que venían siendo pedidas históricamente. En el entonces Departamento de Trabajo (un departamento inerte hasta ese momento, luego convertido en la Secretaría de Previsión y Trabajo) asume como director un tal Juan Domingo Perón.
Apoyado por el grueso sindicatos, Perón empieza a tomar medidas nunca antes vistas a favor de los trabajadores. Millones de personas se ven favorecidas en sus jubilaciones, el Estatuo del Peón Rural saca de la semi-esclavitud a los trabajadores (en serio) del campo, se crean escuelas técnicas dirigidas al obrero (las escuelas-fábrica), aguinaldo, vacaciones pagas y muchísima resoluciones más, todas ellas mejorando el nivel de la excluída clase obrera.
Cada vez más gente se une a los sindicatos, y su bienestar es cada vez mayor al ver que sus pedidos eran escuchados. Los "cabecitas negras" (afectuosa manera de la clase alta, media-alta, e inclusive de un sector de la media, de llamar a los beneficiados con las medidas de Perón) tenían por primera vez derecho a reclamar lo que les correspondía, cobrar lo que les correspondía, trabajar de la manera que debían.
Se escuchará en algún lado decir que Perón se ganó a esta masa a través de "dádivas", de su gran "método para hablar y seducir con palabras", de su carácter de militar (¿Y? No fue él el que le dio el mal significado a esa palabra). Pero NO SE VA A ESCUCHAR HABLAR de los "negritos". JAMÁS vamos a ver a determinada gente admitir que el "cabecita" podía pensar, que el "morochito" estaba gozando de los derechos que EN SU PUTA VIDA tuvo y QUE LE CORRESPONDÍAN.
Perón empieza a ser nombrado como candidato a Presidente, su apoyo popular era algo inocultable y molesto para "los de siempre".
Esos "de siempre" no eran otros que los sectores más conservadores, parte de la clase media (tan atinadamente llamada después "clase medio pelo", por Arturo Jauretche), y estudiantes de "movimientos revolucionarios" (es una lástima que esos muchachos nunca hayan podido distinguir una revolución ni aunque ésta les tocara la puerta de la casa y les diga "¡¡¡HOLAAAAAAAAA, ACÁ ESTOOOOOY, SOY LA REVOLUCIÓOOOOON!!!"). Como sigue sucediendo hoy, esa "izquierda" fue hermosamente funcional al sector al que tanto se rebelaban. Nunca vieron que la Revolución Rusa fue algo enorme, increíble, de donde sacar muchísimos conceptos, pero que no se podía ni puede repetir en Argentina porque tiene OTRA HISTORIA. Ídem Revolución Francesa, ídem Mao (qué deliciosas palabras les dijo el chino cuando fueron del PC argentino a visitarlo).
Pidiendo la cabeza de Perón, estos sectores poblaron las calles de Capital Federal. Esta ira lleva a Farrell a pedir la captura del General, quien es arrestado el 13 de octubre de 1945 y llevado a la cárcel ubicada en la Isla Martín García. Cumplido el deseo, los opositores a Perón salen a festejar en la Plaza San Martín, enfrente del Círculo Militar, donde acude mucha gente.
Pero hubo algo que no tomaron en cuenta, y fue el ENORME apoyo ganado por el Pocho en la clase trabajadora, la cual se siente golpeada por este cimbronazo, y comienzan a decretarse huelgas en TODO EL PAÍS (no sólo en Capital). Al tener que cobrar la quincena, el 16 de octubre, los trabajadores notan que el feriado del 12 de octubre no figura como pago.
Las movilizaciones no se hicieron esperar, y un día como hoy, pero hace 53 años, trabajadores de varios puntos de Capital Federal y de todo el Conurbano se trasladan a Plaza de Mayo pidiendo la liberación del líder. Se pensaba que la manifestación se disolvería rápido, los "negritos" no iban a insistir mucho. Pero no, los "negritos" insistieron, 300.000 "negritos" se juntaron y lavaron sus cansados pies en las fuentes de la Plaza (foto), y los traidores se vieron obligados a entrevistarse con Perón, que debió movilizarse a la Casa Rosada y salir por el balcón a hablar con su gente.
Ya nada sería igual. La popularidad del General creció aún más hasta llegar a su futura postulación y elección como Presidente. Pero eso entra en otro tema. Hoy lo importante es el aniversario del apoyo más grande que vio el país ante una figura política, lo que fue una verdadera revolución popular, aunque a muchos les duela no haberla hecho ellos.

miércoles, 8 de octubre de 2008

Doña Beatriz

Así es la vida de Doña Beatriz. No molesta a nadie mientras que no la molesten.
Se levanta todos los días, religiosamente, a las siete de la mañana, se lava la cara, se pone el batón de algodón rosa, y arranca para la cocina. Prende la radio (siempre en el mismo dial) y se ceba unos mates al ritmo de noticias caóticas y "Cafetín de Buenos Aires" (con el locutor cantando encima de la música). Después de los Don Satur y el último mate, se viste como cualquiera que va a trabajar, y sale.
Camina una cuadra hasta la avenida y espera un taxi, al mismo tiempo que insulta por el descontrol, el ruido de los autos y colectivos, los chicos que piden monedas, la inseguridad, los drogadictos y demás.
Divisa un Peugeot 504 con el cartelito rojo de "Libre" encendido. Estira el brazo hacia la calle, y con el dedo índice estirado mueve la mano de arriba hacia abajo, mientras chista. El chofer responde a la seña y frena. Está escuchando la misma radio de Doña Beatriz, que se complace mucho con esto, y habla muy gustosa con el taxista de la situación del país durante todo el viaje.
Llega muy puntual al trabajo. Ni un minuto más, ni un minuto menos. Se sienta en su lugar. Trabaja, casi ni ríe, excepto por determinados comentarios que le arrancan una sonrisa altanera.
A las seis en punto de la tarde, apaga todo y emprende la vuelta, una vez más en taxi. Sabe que es un gasto enorme, pero viajar en subte es imposible, mucho más en colectivo. Todos apretados, gente que sube a vender cosas... Ella ya no está para eso. En otras épocas lo ha hecho, pero hoy, a sus cincuentitantos, no es lo mismo.
Merienda lo mismo que desayunó, y comienza a preparar la cena. A cada hijo la comida que le gusta, porque sino después se ponen insoportables.
La cena tampoco parece muy feliz. Los comentarios que más se escuchan son reproches de la manera en la que se están manejando las cosas, de cómo se maneja a la gente, cómo se dejan meter el dedo en culo. Qué facil es comprar a la gente... ¿Quién quiere postre?
Al final del día, Doña Beatriz se va a acostar en la misma cama con su mismo marido de toda la vida. No va a hacer el amor, eso pasó hace ya muchos años. Tal vez vez apenas le dirija alguna palabra. Apoyará su cabeza en la almohada, disparará un resoplido por su boca seca, y tristemente se dormirá, creyendo que es gente de bien.

lunes, 6 de octubre de 2008

Se fue la tercera


Ya va la tercera consecutiva que voy a ver a Andrelo. Ésta, creo, fue la más tranquila, la que tuvo el repertorio menos "fogoso", aunque Calamaro no se destaque por generar un pogo constante (como sí los Decadentes. Párrafo aparte para ellos, cada vez son más dioses :P. WELCOME TO TIJUANA; TEQUILA, SEXO, MARIHUANA!!! Jejejeje, tremendo cover pseudo-punk se mandaron). Igual, fue un muy buen recital.
Tocó lo que tuvo que tocar, como siempre. Y, también como siempre, manejó muy bien el repertorio, mechando temas como "El día mundial de la mujer", "Todavía una canción de amor", o "La espuma de las orillas", por nombrar algo más actual.
Además, me gustaron los pequeños cultos a Sabina, Bob Marley, y al tango (esos son fija).

Y ya que estamos:

¡¡¡Ídolos!!! ¡¡¡Qué manera de meter hits la puta que los parió!!!