viernes, 29 de octubre de 2010

Chau Hermano

Fue un golpe feroz, un mazazo. Duele por todos los rincones pensar en el porvenir, por que estoy convencido que en Néstor había un bastión muy difícil de derribar, un cimiento donde muchos quisimos apoyarnos, o mejor dicho, donde muchos nos apoyamos hoy. Néstor no es ayer, jamás lo fue aunque le duela a Morales Solá, Fraga y Van Der Kooy. Néstor siempre fue hoy, y ahora más que nunca la fuerza tiene que estar en todos para que no se convierta en ayer, y pueda ser mañana. Está en todos los que creemos en este proyecto tomar el guante, hacernos cargo, no callarse, no sentir vergüenza de decir que estamos con el proyecto.
No hay que dejar que digan que "Los K" viven del "choripaneo". Este proyecto nacional y popular hoy tiene tanta banca (Sí, TANTA banca. Ni nombremos las encuestas, FÍJENSE LO QUE FUE PLAZA DE MAYO, LO QUE FUE TODO EL PAÍS) por que lo ha sustentado en acciones, con defectos y virtudes. Pero hace tiempo que en los diarios lo que se hace únicamente es bombardear a un proyecto del gobierno, una iniciativa. Hay acción, hay movimiento. ¿Qué van a decir? ¿Que la multitud era Chori y Vino? ¿Que la gente llorando, destruida, acongojada, buscando fuerzas, toda paga y fingida? Dejémosnos de romper las pelotas.
Yo crecí en los 90, cuando la imagen de la política era la mugre en la que no había que meterse, ese discurso que instaló la dictadura y que tantos tomaron como propio.
Algunos tardaron menos, otros tardamos más en confiar en que todo lo que pasaba era cierto. Pero pudimos entender que no era vender humo descolgar un cuadro, hacer juicio a represores, derogar la Obediencia Debida y Punto Final.
La baja en el desempleo no es vender humo, como no lo es la reactivación económica, la priorización de lo nacional, la unión de Latinoamérica, la recuperación de tanto que nos habían robado. Eso por lo que tantos "izquirdoadictos" pelearon toda la vida, pero que jamás aceptaron es que este gobierno, con sus formas, efectivamente lo logró.
Hoy el proyecto sigue con Cristina, que va a vivir vapuleada (ni dejaron un mínimo tiempo de luto para marcarle el camino, ¿o no Rosendo?), que está en todos darle apoyo, convencer a la gente, hablar, no callarse, no dejar que las cosas pasen. No quiero volver a ver lo que recuerdo de los 90, quiero ver que todo siga avanzando, que cada vez menos pibes estén en la calle, que las organizaciones sociales tengan toda la posibilidad de ser escuchadas, que no se pierdan más generacion en la desigualdad, que no se reprima la protesta social (de cualquiera), que se pueda caer el caretaje de los medios hegemónicos, de los monopolios, que siga bajando el desempleo, que crezca la alegría (ya lo dijo Jauretche). Me da pavor el simplemente pensar en volver a eso. Tienen que pensarlo bien todos, y no acordarnos cuando nos estén cagando a palos en la calle por salir a reclamar algo nuestro (2001, timbre tilingos).
Hoy Argentina se ve obligada a no retroceder, obligados todos a unirnos para seguir avanzando, para generar conciencia, para conseguir justicia social.
Hoy más que nunca: ¡¡¡NI UN PASO ATRÁS CARAJO!!!



Hasta siempre Hermano.