Desenvainando su espada de afecto,
ella sale a la calle,
combatiendo al reloj.
Empuñando su escudo de cariño,
ella sale a la calle,
defendiéndose del clima.
Aun vencida por algunos síntomas de vejez,
ella sale a la calle,
sin esa bandera blanca que siempre,
a cada choque, promete flamear,
y deja una y otra vez
tirada en la mesita de luz.
Y entonces, sale a la calle,
olvidando los relojes,
ignorando el calendario,
haciendo caso omiso a las luces
que iluminan su barrio, su esquina donde,
entre coches, perros y putas,
ella espera a su amor,
que quizás venga, quizás no.
martes, 24 de junio de 2008
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que te carcoma la curiosidad
ResponderBorrarmuajajajajaja
ahora pasamos a otro temaaa
putin
que lindo lo escrito
de donde salio??
ni se
hoy vi a ale..
hice una breve visita en su casa a la salidad del job
:)
te amo moboliquim :P
adivina quien es la que te firmo antes
ResponderBorrar:P
chan chan chan
seguramente anda saltando revoleando purpurina
:P